No ducharse a diario para cuidar el agua: ¿Qué dicen los expertos?

Hace algunas semanas te contamos del último informe que analiza los devastadores efectos que está dejando el cambio climático en el planeta.

En este sentido, cada vez se está tomando más conciencia que debemos actuar ya.

Hay que cuidar el planeta. Hay que cuidar el agua, hay que reciclar y hacer lo que esté en nuestras manos para cuidar nuestro medioambiente hoy. Mañana ya será tarde.

En este contexto es que algunos postulan que quizá, la ducha diaria no sería tan necesaria…¿pero qué dicen los expertos al respecto?

Si bien pueden haber algunas diferencias, la opinión mayoritaria es que la ducha diaria estaría “permitida” según la ciencia.

“No bañarse algunos días en situaciones más extremas de escasez puede ser necesario, pero no es deseable. En contextos normales se espera que las personas puedan bañarse todas las veces que consideren necesarias para mantener su higiene, pero regulando el consumo de agua”, explicó a CNN el hidrólogo Miguel Doria.

Danilo Ríos, magíster en Ingeniería Ambiental y docente de la Universidad de la República de Uruguay, coincide en que no es aconsejable suprimir el baño. “Hay muchas cosas antes“, apunta, y explica que esa medida por sí sola podría considerarse “irrelevante” en comparación con otras áreas en las que se puede ahorrar.

Un pequeño matiz expone Elaine Larson, profesora residente de la Academia de Medicina de Nueva York y catedrática emérita de Epidemiología de la Escuela de Salud Pública Mailman de la Universidad de Columbia.

La experta dice que, por ejemplo, la ducha diaria no es tan necesaria si pasas la mayor parte del día dentro de tu casa y no entras en contacto con gérmenes desconocidos.

Y afirma que esto vale en especial para los adultos mayores, cuya piel se seca con el lavado frecuente y puede terminar siendo contraproducente.

El ahorro doméstico sí importa

No se trata de que el ahorro doméstico no importe, de hecho, es fundamental según expertos.

“Las acciones individuales suman y son importantes, particularmente en situaciones de escasez hídrica”, dice Doria. Ferney Díaz, de WWF Colombia coincide en que “en los hogares definitivamente hay un epicentro de cambio gigantesco”. ¿Pero dónde? ¿Cómo hacerlo?

El aporte determinante que podemos hacer como individuos, según Díaz, está lejos de la ducha: es reducir el desperdicio de alimentos.

Cerca del 70% del agua dulce que se utiliza va para la producción de alimentos y el 40% de los alimentos se desperdician en las distintas partes del proceso. Eso quiere decir que, además, se desperdicia el agua que se usó en su producción.

Por tanto, las decisiones de compra, cocina y consumo de alimentos son clave.

En este sentido, Díaz sugiere que es ideal una dieta variada que privilegie el consumo de frutas y verduras, que representan cerca del 60% de los alimentos desperdiciados.

También recomienda elegir productos que estén cerca de la fecha de vencimiento y no descartar vegetales solo por su aspecto.

Díaz explica que, en promedio, “para producir un plátano grande se usan cerca de 160 litros de agua, el equivalente a ducharse durante 17 minutos. Esto es lo que se pierde cuando botamos un plátano”.

¿Qué cosas sí debería tomar en cuenta al ducharme?

Si necesitas esa ducha, adelante. Pero ten en cuenta algunas recomendaciones.

“En lugar de no bañarse, se pueden adoptar hábitos como cerrar la llave mientras uno se enjabona, evitar los baños de inmersión o limitar el uso de la ducha a no más de cinco minutos. Otro consejo es utilizar aireadores o dispersores, dicen Doria y Ríos, ya que estos permiten economizar el agua.

El mismo Gobierno de Chile presentó en 2019 su campaña “dúchate en 3”. ¿La recuerdas?