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Es la capitana de la selección de fútbol de Estados Unidos y por supuesto la jugadora estrella de su equipo. Estamos hablando de Megan Rapinoe.
Comenzó a jugar fútbol en la adolescencia y de ahí en adelante su carrera fue en completo ascenso. Además de representar a su país, Megan también ha defendido la camiseta de equipos como el Olympique de Lyon y el Seattle Reign, pero sin duda su partido más importante es el que juega fuera de la cancha de fútbol.
Y es que Megan Rapinoe se ha convertido en un referente contra la desigualdad en cualquiera de sus formas: racismo, sexismo y homofobia, aunque claro, su principal bandera de lucha es eliminar la desigualdad salarial entre hombres y mujeres en el deporte, sobre todo en el fútbol, donde la diferencia de recursos, interés y preocupación es abismante.
Luego de ganar la Copa del Mundo con su país en 2019, Megan ha aprovechado la vitrina y la buena exposición que ha tenido el fútbol femenino para evidenciar esta situación desigual y también para motivar a miles de personas a dejar de lado las diferencias, en todo ámbito de la vida, porque como ella misma dijo en uno de sus discursos más importantes, “tenemos que amar más y odiar menos”.
Romántica TV
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