Le dio vida a uno de los personajes más queridos de la pantalla grande. Carrie Fisher fue una actriz, escritora y guionista de cine que sigue siendo recordada como la mujer que encarnó a la Princesa Leia en la saga de Star Wars.
Pero la carrera de Carrie Fisher fue mucho más que un personaje icónico.
A pesar de que sus otros papeles actorales no fueron tan relevantes como el de Leia, su rol más importante lo jugó en la vida real, enfrentándose a sus adicciones, al alcoholismo y a su trastorno bipolar, luchando contra los prejuicios y tabúes que existen en torno a la salud mental.
A Carrie Fisher le sobraba talento y afortunadamente supo cómo aprovecharlo. Su faceta como escritora y guionista fue una veta que le trajo muchos reconocimientos y que la mantuvieron vigente en lo que era su gran pasión: el cine.
De hecho, es reconocida como una de las mejores arregladoras de guiones del cine reciente, por películas como “Hook”; “El Amor tiene dos caras”; “El Imperio Contraataca”; “El Retorno del Jedi”; “El Bar Coyote”; “Sisters Act”; las precuelas de “Star Wars”.
Tras su retorno como Princesa Leia a Star Wars en 2015, se enfrentó al lado más cruel e ingrato de la industria: los comentarios machistas y sexistas basados en su imagen, que claramente había cambiado después de 32 años.
Sin duda su gran legado es saber que jamás se debe confundir la juventud y la belleza con el talento.