Un método que está en discusión: ¿Qué es la maternidad subrogada o vientre de alquiler?

A nivel mundial son varias las organizaciones que hablan de que la infertilidad está en ascenso. Por lo menos, según la OMS unas 186 personas vivirían con infertilidad en todo el planeta y en Chile las parejas que estarían en esta situación estarían entre el 10% y el 15%.

Ante esto, es que varios profesionales acusan la falta de políticas públicas que por lo menos en nuestro país, atiendan la salud reproductiva. Esto, mientras en otros países ya desarrollan un método bastante cuestionado.

La gestación subrogada, que no sólo se ha transformado en una alternativa para personas con problemas de fertilidad. También es un método por el que están optando personas solteras y parejas homosexuales.

¿Qué es la gestación subrogada?

La maternidad subrogada o más conocida como vientre de alquiler es un tratamiento de fertilización asistida. En este proceso participa una mujer, quien ofrece su útero para llevar adelante la gestación del hijo de otras personas. En su mayoría parejas que no pueden concebir hijos por su cuenta.

Al momento de optar por ella tendrás dos opciones. El embarazo se produce por un espermatozoide donado que fecunda los óvulos de la gestante o de una donante.

Hasta ahora, la gestación subrogada es legal en algunos estados de Estados Unidos; en Australia; Reino Unido; Grecia; Rusia; Canadá; India; Tailandia y Sudáfrica.

¿Por qué no es legal en Chile?

No en todos los países está permitido este tipo de tratamiento. Según la Facultad de Derecho de la Universidad Católica de Chile, Leonor Etcheberry, abogada integrante de la Corte Suprema, menciona que “la maternidad subrogada no está legislada específicamente en este país, solo existen proyectos de ley”.

Por lo que un contrato de maternidad subrogada no sería válido. Esto quiere decir que en el caso de que la mujer gestaste no quiera entregar al niño que ella tuvo, a pesar de que haya un acuerdo o un contrato de por medio, podría quedarse con esa guagua. Esto porque al no ser legal, se le entregaría el certificado de nacimiento a quien dio a luz.

Es decir, un contrato por gestación subrogada en Chile no tendría validez, según Etcheberry. “No sería válido ya que sería sobre un objeto ilícito; pero lo más importante es que si la madre que se compromete a gestar al hijo después no lo quiere entregar, como el contrato no es válido no se podría exigir la entrega y para la ley la madre sería la que consta en el certificado de parto y en la posterior inscripción en el Registro Civil”, aseguró.

La gestación subrogada también provoca resistencia cuando la regulación de algunos países permite que se use para fines comerciales. Por eso, a propósito del debate que abrió la maternidad de la actriz española Ana Obregón, que a sus 68 años optó por un vientre de alquiler en Estados Unidos, la ministra de la Mujer, Antonia Orellana aclaró varias cosas sobre el tema.

Comentando su participación en Comission on the Status of Women, de la ONU, aseguró que advirtieron sobre “los peligros de la gestación subrogada con fines comerciales”.

Orellana aseguró que en plena sesión explicó que no “prestamos el cuerpo” y que es indispensable “erradicar la violencia en todas sus formas, incluidas las que se abren hoy”.