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Tardaron casi 50 años: Academia pide disculpas a activista que rechazó estatuilla a nombre de Marlon Brando

Marlon Brando es un actor talentoso, pero también controvertido y 1972 fue un año importante para él. Es que fueron dos las películas que en ese entonces lo hicieron destacar en lo más alto: “El último tango en París” y “El Padrino”.

Pero no sólo se quedaron en eso, también lo dejaron envuelto en dos de las polémicas más recordadas de Hollywood. Una de esas polémicas busca llegar a su fin casi 50 años después.

En 1973 Brando recibió el Oscar a Mejor Actor por su rol como Vito Corleone, en la película basada en los libros de Mario Puzo. Pero en vez de asistir a la premiación, envío a una joven activista por los derechos indígenas y actriz llamada Sacheen Littlefeather.

Ella con rostro serio y con vestimenta tradicional del pueblo apache, se subió al estrado para rechazar la estatuilla. Una manifestación de Brando a propósito de los malos tratos que daba la industria del cine a los nativos americanos.

La protesta no fue bien recibida por los asistentes a la ceremonia quienes en su mayoría la abuchearon. Todo esto mientras daba un discurso en el que hablaba a nombre del ganador diciendo “cuando fui nominado por El Padrino me pareció absurdo ir a la ceremonia. Resultaba grotesco festejar a una industria que había difamado y desfigurado sistemáticamente a los indios norteamericanos a lo largo de seis décadas, mientras en aquel momento doscientos indios se hallaban sitiados en Wounded Knee”.

Un episodio que casi llega a la violencia física. De hecho, ella contó que tuvo que pedir ayuda a los guardias para evitar que John Wayne la agrediera.

¿Disculpa tardía?

Casi han pasado 5 décadas de ese momento y la Academia reaccionó. A través de una carta firmada por David Rubin, presidente de la organización, pedían disculpas con palabras como “Los insultos que sufriste a causa de esta declaración estaban fuera de lugar e injustificados”.

Además, explicó “Durante demasiado tiempo, la valentía que demostraste no ha sido reconocida. Por eso, te ofrecemos nuestras más sinceras disculpas y nuestra sincera admiración”.

La publicación de la carta viene de la mano con el anuncio de que la activista, de ahora 75 años, será invitada y dará un discurso el próximo 17 de septiembre en el Museo de los Oscar.

Una invitación que ella respondió diciendo “Nosotros, los indios, somos gente muy paciente, ¡sólo han pasado 50 años!” y tras eso explicó “Me alegra el corazón ver cuánto ha cambiado todo desde que no acepté el Oscar hace 50 años”.

1972, un año controvertido

Aunque hubo grupos que destacaron la protesta planeada por el actor, hubo quienes la cuestionaron. Sobre todo después de que en 2007 María Schneider, la coprotagonista de la otra cinta estrenada ese año y protagonizada por Brando, hiciera una horrible confesión.

“El último tango en París” es la película en la que ella se hizo conocida por una lamentablemente escena. Una en el que el consentimiento y el respeto no fueron precisamente las palabras que la podrían describir.

Schneider en ese entonces tenía 19 años y era una prometedora actriz, mientras que Brando tenía 48 y un camino bastante más largo en el mundo del cine. En la película dirigida por Bernardo Bertonucci, la intérprete tenía que recrear junto al actor, una violación.

En un momento de la grabación, Brando y Bertonucci, decidieron usar mantequilla en vez de lubricante sin avisarle a Schneider.

“Debería haber llamado a mi agente o mandado a mi abogado al set porque no puedes obligar a alguien a hacer algo que no está en el guión, pero en ese momento yo no lo sabía”.

La falta de consentimiento fue algo que el director usó para disculparse, asegurando que ni él, ni Marlon Brando le contaron a Maria Schneider sobre el uso de mantequilla, porque querían que reaccionara como una niña no como una actriz.

Quería que sintiera la rabia y la humillación”, aseguró el cineasta, quien pese a que consideró “horrible” esta decisión, aseguró no arrepentirse de ella.

Esto fue criticado por varios actores de Hollywood, pero hasta hoy la Academia no ha dicho nada al respecto.