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Un día como hoy: Valentina Tereshkova se convirtió en la primera mujer en viajar al espacio

En días 16 de junio ocurrieron grandes hitos de la historia como por ejemplo el estreno de la película “Psicosis” en Nueva York y el Bloomsday, un evento anual en honor a la novela “Ulises” de James Joyce. Sin embargo, lo que más se destaca es un hecho que marcó un antes y un después: la primera mujer que viajó al espacio.

El 16 de junio de 1963, la cosmonauta rusa Valentina Vladímirovna Tereshkova se convirtió en la primera mujer de la historia en viajar al espacio. Con tan solo 26 años, voló al exterior de la tierra a bordo de la nave Vostok 6. 

Tereshkova realizó 70 horas de vuelo y 48 vueltas a la tierra con el apodo de “Chaika”, que significa gaviota en idioma ruso. Tras tres largos días de una travesía única, la astronauta aterrizó en una aldea de Karaganda (Kazajistán) sin buenas sensaciones corporales, pero logró dar un gran paso para la imagen de las mujeres de todo el mundo.

La carrera hasta lo más alto

Hija de un tractorista y una trabajadora de la industria textil, Tereshkova nació en una familia proletaria humilde de la Unión Soviética de posguerra. En su niñez no fue a la escuela hasta los 8 años de edad, proceso en el que tampoco pudo estar mucho tiempo, ya que abandonó el académico para trabajar en una fábrica textil.

A pesar de las adversidades, la juventud de la futura astronauta estuvo marcada de actividades diversas. Antes de cumplir 20 años mostró un gran interés por el paracaidismo, tanto así que se unió al  Aeroclub local; y dio su primer salto cuando cumplió 22 años. Dos años más tarde, se unió al Partido Comunista como secretaria, filas a las que se uniría tiempo después.

En 1961 la URSS lanzó el programa espacial Vostok, en la cual Yuri Gagarin  llegó a ser el primer ser humano en salir al espacio exterior. Pero para otro viaje del proyecto, las autoridades requerían a una mujer; y como Tereshkova reunía todas las capacidades, fue seleccionada.

La odisea no fue nada fácil. La cosmonauta sintió mareos y jaquecas que la afectaron, pero pese a eso, logró mantener al día el diario de a bordo. Por si fuera poco, el programa presentó un error en la trayectoria, a lo que Tereshkova tuvo que reaccionar modificándola para que su nave no se alejara de la tierra y pudiera volver sana y salva.

Tras su hazaña figuró como miembro del Soviet Supremo y del Comité Central del Partido Comunista. En 1969 se graduó de ingeniería espacial y un doctorado en ingeniería 8 años después. Durante su trayectoria también sintió atracción por la política, así que también tuvo algunos cargos políticos en su país.

Además, participó en la Conferencia Mundial de la ONU con motivo del Año Internacional de la Mujer, llevada a cabo en México en 1975, y en 1982 recibió el premio Simba por su labor de promoción de las mujeres.

Es innegable que el nombre de Valentina Vladímirovna Tereshkova quedará grabado en la historia de la humanidad como una de las mujeres más destacadas.