Noticias

¿Solución al acoso en el transporte público? Vagones exclusivos para mujeres en el Metro vuelven al debate

Si en algún momento viviste una situación de acoso en el transporte público, lamentablemente estás en el 90% de mujeres que afirmó haberla sufrido.

Por lo menos, eso es parte de las cifras que entregaron desde la Gobernación de Santiago. Tras realizar una encuesta, concluyeron que además, un 30% de las mujeres que han sido víctimas de acoso callejero en el transporte público no saben cómo hacer la denuncia.

Pero esto revive un tema del que ya se había hablado en 2018. En 2017 Metro recibió 300 denuncias de acoso en sus vagones, por lo mismo, es que un grupo de parlamentarios presentó un proyecto para que en el servicio dispusiera de vagones sólo para mujeres.

Y aunque el tema generó debate, para las autoridades no fue suficiente. Autoridades como la exministra de Transporte, Gloria Hutt y de la mujer, Isabel Plá, argumentaron que podría generar segregación.

Es la misma postura que mantiene Metro hasta ahora, y así lo explicó a Emol Paulina del Campo, gerenta de clientes y sostenibilidad de la compañía.

“La solución no era segregar a las mujeres y separarlas en carros específicos sin poder transitar libremente por la red, independiente que esto se pueda analizar, pero esto también ocurre en otros espacios públicos”.

Algo en lo que coincide Valeria Ortega, presidenta de la Comisión de Género del Gobierno regional: “Esto es algo cultural, que se puede cambiar a futuro. Esperamos que la discusión no se dé en esta forma, porque la solución no es excluir a las mujeres de la sociedad, sino que hacerlas sentir seguras”.

Iniciativa en el Mundo

Esto ya se ha hecho en otros países, entre ellos Japón, Brasil, India, Malasia y México, donde esto se realiza desde 1970.

Desde el 2000 las autoridades mexicanas que los dos primeros vagones de cada tren fueran de uso exclusivo de mujeres  y niños menores de 12 años. El tema es que aunque se estipuló que fuera sólo para uso de pasajeras, a esos vagones también se suben hombres mayores. Algo que para algunas pasajeras, da origen a situaciones de acoso.

Una de ellas, Vanessa comentó a Infobae que aún recuerda la vez en que un hombre mayor tocó mujeres justificando que era “sin querer”. Cuando los policías fueron alertado, sólo lo cambiaron de vagón.

Fue esa misma usuaria la que en todo caso dice sentirse bastante segura en estos vagones, pero para ella la solución para terminar con la violencia de género en el transporte público debería ser otra.

“Te tratan como un sector aparte, que necesita ser cuidado y protegido”, aseguró.

¿Cuál crees que es la solución?.