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“Todo es posible”: Puntaje nacional con TOC entregó un mensaje de esperanza

Tras un mes de espera, el día de ayer se publicaron los resultados de la Prueba de Transición  para la Admisión Universitaria (PTU). Examen que decidirá la institución en la que estudiarán aquellos que la rindieron. Entre estos, se encuentran los puntajes nacionales, personas que obtuvieron el mayor puntaje posible; quienes además, pudieron contar su historia desde el Palacio de La Moneda.

Fueron 15 los alumnos que representaron a los 180 puntajes nacionales totales en la tradicional reunión con el presidente de la república. Pero hubo una puntaje nacional que llamó la atención por su discurso. Se trató de Antonia Guerrero, quien entregó un mensaje de esperanza para los jóvenes a pesar de las adversidades.

“Soy una chica de Puente Alto, criada solo por mi mamá. Tengo Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC), soy la clase de persona que nunca soñaría con esto, y aquí estoy. El mensaje que quiero dar es que todo es posible”, relató la futura universitaria de 18 años.

Guerrero contó que en su casa la situación no ha sido fácil, había momentos en donde no podían pagar la luz y dependían de otro familiar para ese sustento, algo que de un momento a otro dejó de hacer.

A pesar de eso, la estudiante agradece a cada persona que la apoyó durante su preparación para la PTU. En especial a las mujeres de casa: su madre y su hermana. Guerrero contó que las dificultades en su hogar disminuyeron cuando su hermana de 25 años se tituló de ingeniería civil industrial.

Sin embargo, no solamente tuvo obstáculos en su casa, sino que también en el colegio. Debido a su TOC diagnosticado en primero medio, muchas veces fue aislada en la escuela. Eso hasta que llegó al Liceo Bicentenario San Pedro, donde dejó de ser discriminada y pudo relacionarse.

En la misma línea, también agradeció a su profesora de lenguaje de dicho liceo. “Mi profe (sic) jefe, Valentina Asenjo es excelente, se le nota tanto la pasión por la literatura y enseña muy clarito”, constató Guerrero.

A pesar de haber pasado por muchas incertidumbres y preguntas internas, Antonia Guerrero está segura de que estudiará medicina para especializarse en neurocirugía. Esto por su deseo de ayudar a las personas con enfermedades neurodegenerativas.

Sin duda alguna, Guerrero es un gran ejemplo de que a pesar de las adversidades, siempre hay una oportunidad para llegar a metas que el resto no espera que lleguemos.