¡Se aprobó la Ley Dominga! Los cambios que asegurarán un duelo perinatal más digno

Poner fin a la violencia obstétrica en un momento extremadamente doloroso de un embarazo: la pérdida de un hijo. Ese es el principal objetivo de la Ley Dominga que ya fue aprobada por los parlamentarios y ahora está a la espera de su promulgación.

La base de esta iniciativa es que todas las instituciones de salud, sin distinguir si son privadas o públicas, cuenten con un protocolo frente al duelo perinatal, este debe contar con un mejor manejo médico y apoyo psicológico para la madre y el resto de la familia.

Un proyecto que nació gracias a la iniciativa de varias mujeres que pasaron por este proceso y que obtuvo 130 votos a favor.

Después de su promulgación, el Ministerio de Salud tendrá 6 meses para dictar una norma para que los establecimientos de salud resguarden la integridad de las madres y las familias después de una pérdida.

¿Qué cambios va a introducir esta ley?

Por el momento se han estipulado las modificaciones al Código del Trabajo en caso de duelo perinatal:

• En el caso de la muerte de una hija o hijo, todo trabajador tendrá un permiso de 10 días corridos de permiso pagado.
• En caso de la muerte del cónyuge o pareja, el permiso será de 7 días.
• En ambos casos, el permiso será adicional al feriado anual independientemente del tiempo de servicio.
• Si una hija o hijo muere durante la gestación, el permiso será de 10 días hábiles.
• En caso de la muerte de la madre o el padre del trabajador, el permiso será de 3 días hábiles.

Además, contempla modificaciones en aspectos como:

• Que los profesionales de la salud entreguen de forma asertiva la información a padres y grupo familiar luego de la pérdida de un hijo.
• Busca la entrega de asistencia inmediata de profesionales como psiquiatras, matrones y psicólogos, para enfrentar la muerte de una hija o hijo.
• Toda pérdida de un nonato o neonato debe ser reconocida, identificando datos como nombre, peso, estatura, sexo y hora de nacimiento.
• Asegurar que personas que pasen por este proceso, no sean hospitalizadas en áreas de maternidad, para evitar tener contacto con recién nacidos.
• Durante procedimientos como legrado o inducción del parto se podrá autorizar al menos un acompañante. Y si el recinto lo permite, los controles se harán en salas aisladas, y en horarios donde no haya embarazadas o madres con hijos recién nacidos.
• Para que las madres puedan iniciar un duelo digno, se tendrá que asegurar espacios de contacto digno con el hijo o hija fallecida.
• Las mujeres o personas gestantes que hayan sufrido una anterior muerte perinatal, podrán acceder al acompañamiento de un equipo de duelo perinatal en las siguientes gestaciones.

¿Dónde nace la iniciativa?

Es una lucha que inició Aracelly Brito, quien sufrió la muerte de una hija en avanzada etapa gestacional.

Luego, debió soportar ser llevada a una sala común donde otras madres recibían en sus brazos a sus hijas e hijos recién nacidos. Dicha experiencia, junto a otras vividas posteriormente, la impulsó a ser la gestora social de la denominada “Ley Dominga”, en homenaje a su hija.

“Como familia no recibimos ningún tipo de acompañamiento por parte de esa institución de salud, ni siquiera me dejaban tomar en brazos a mi hija. Decidimos que la muerte de Dominga no podía ser en vano y debía existir una normativa para enfrentar esta desgarradora situación. La iniciativa contribuirá a que este duelo deje de ser invisible ante la sociedad, es un logro de cientos de familias que a diario apoyan la causa y será de gran ayuda para que los profesionales de la salud cuenten con herramientas para afrontar el proceso desde la empatía, respeto y reconocimiento de ese niña o niño fallecido”.

Una medida que deja a Chile como uno de los países pioneros en Latinoamérica en este aspecto y que seguramente será el inicio de leyes que aseguren un parto, un embarazo y una maternidad dignos.