Noticias

¿Es necesario para nuestro cuerpo que consumamos productos lácteos?

Hace algunos años atrás, esto ni siquiera era tema. No había discusión posible.

Sin embargo, al igual que con otros alimentos, la leche en particular y los lácteos en general están puestos en la lupa. Su consenso no es para nada unánime.

Y es que diferentes corrientes recomiendan dejar de consumir este alimento, ya sea por la crueldad animal a la que está asociada o por razones de salud.

¿Por qué no consumir lácteos?

Los detractores de la leche apelan principalmente a la aparición de alergias e intolerancia. Cada año, más niños desarrollan estas enfermedades, incluso ya en 2015 entre el 65 y el 70% de la población mundial tenía alguna forma de intolerancia a la lactosa.

Ambas condiciones provocan malestar estomacal, pero pueden derivar en problemas más graves en el sistema respiratorio o anafilaxia.

Por otro lado, otros estudios han asociado el consumo de este alimento con problemas dermatológicos como acné en adultos, eczema o incluso se ha definido como un gatillante para la rosácea.

Según un estudio de la Escuela de Salud Pública de la Escuela de Harvard, los lácteos no son peligrosos, pero tampoco son estrictamente necesarios para mantener una dieta saludable.

Para el destacado doctor colombiano y escritor de “El milagro metabólico”, Carlos Jaramillo, la leche no es buena ni necesaria. Solo lo es la leche materna.

Según él, los humanos nunca hemos necesitado la leche de vaca ni sus derivados y el calcio lo podemos obtener de varias otras fuentes, con alimentos como el brócoli o las almendras.

¿Y por qué sí sería recomendable?

El aporte nutricional de la leche puede ser fundamental, dependiendo de la dieta que se lleve.

Según Natalia Contreras, académica de la Escuela de Nutrición y Dietética de la U. Andrés Bello, destaca “por su aporte de proteínas de alto valor biológico, aporte de hidratos de carbono y grasas y vitaminas liposolubles”.

Dependiendo del tipo de leche, tendrá distinto aporte nutricional, siendo la entera la que tiene más grasa. “1 porción de lácteo aporta aproximadamente 230 mg de calcio que equivale al 25% del requerimiento promedio de un adulto sano”, explicó la profesora Contreras.

La leche es una gran fuente de vitamina B12 y B5, magnesio y Zinc. Incluso la OMS sigue recomendado hasta el día de hoy que diariamente se consuman 3 a 4 porciones de lácteos en diferentes formatos, pero priorizando los bajos en grasa.